Medicina natural, actualidad y economía

Preocupémonos positivamente de los idiomas de nuestros pueblos originarios, especialmente del mapudungún

A raíz de una fuerte crítica a mi artículo sobre el Cerro Santa Lucía, Huelén o Welen me preocupé un poco más de leer sobre el tema del idioma mapuche y de su escritura.

Pude reunir información histórica interesante. Se confirma que el mapudungun no era un idioma escrito, ágrafo. Su escritura se debió al traslado de los sonidos al idioma del que lo oía, españoles inicialmente y posteriormente alemanes, en particular misioneros capuchinos de habla germana. Las letras provienen de quienes trasladaron los sonidos a su idioma.

Muchos de los sonidos no son fáciles de trasladar a otros idiomas y es por ello una de las causas que se usan nuevas combinaciones de letras e incluso se crean nuevas letras. Es así como se llegan a formar alfabetos con distintas cantidades de letras; se hacen presentes letras como la w al parecer de origen germánico para la expresión oral“ue” bastante usada en este idioma.

Un caso externo interesante de analizar es el del creole o creol que se habla mayoritariamente en Haití en su población mayoritaria proveniente de los esclavos traídos desde África y parcialmente en otros países del Caribe de raza negra de origen similar. En Haití se escribe en francés, su idioma oficial pero que no lo habla la mayoría, que sólo sabe el creole, no escrito. En República Dominicana el creol se escribe en español. Estas formas de escritura sin duda contribuyen a un mejor conocimiento del idioma ágrafo.

En Chile el caso es distinto, ya que el mapudungun tiene una escritura en un alfabeto que no es el nacional. Esto parece ser un obstáculo para su uso más generalizado, y por lo tanto para un uso menor, centrado especialmente en ciertas minorías.

En mi opinión un caso típico fue el pretender que el cerro Santa Lucía, en lugar de llamarse Huelén, nombre conocido por gran parte de la población, ya que eso se enseña en la educación formal desde la educación básica, se pretendió ponerle Welen, incluso sin acentuarla. Es fácil que se lea con “uelen”, forma verbal del verbo oler ya sea del tiempo verbal Presente o del Imperativo. Quizá si se hubiese considerado Huelén en la consulta, el resultado de ésta hubiera sido positivo. Cabe recodar que sólo poco más del 50% de los consultados fue partidario de mantener el nombre de Santa Lucía.

Hay estudios que demuestran que el niño mapuche al llegar a la edad escolar que no habla el español, tiene enormes dificultades para iniciarse en este idioma y desde luego para leerlo y escribirlo. Se ha recomendado que inicie su vida escolar con el idioma materno, para después entrar al español o castellano como segundo idioma. Parece importante que para estos inicios se use el mapudungun escrito en español; posiblemente esta forma de escribirlo puede contribuir a que no se debiliten los porcentajes de la población mapuche que sigan dominando el mapudungun y desde luego que no deserten de los estudios escolares.

Las toponimias en mapuche traducidas al español, son sin duda una forma de ampliar el conocimiento nacional de esta lengua originaria.

En la revisión bibliográfica me he encontrado con dos fuentes interesante, una es un diccionario español mapuche en que las palabras mapuches están escritas en español. Más adelante lo incluyo en este artículo.

La otra es un libro interesante y práctico escrito por el P. Ernesto Wilhelm de Moesbach cuya primera edición es de 1944. Se titula “Voz de Arauco”. En esa publicación se usan solo las siguientes letras: A, b, c, ch, d, e, f, g, h, i, j, l, ll, m, n, ñ, o, p, q, r, s, t, u, v, y, z. Yo tuve acceso a la cuarta edición publicada en 1954. El no usa w a pesar de ser de nacionalidad alemana.

Tener presente que Ernesto Wilhelm de Moesbach (Nació en Moesbach, Alemania, 19 de septiembre de 1882 y falleció en Panguipulli el 5 de mayo de 1963) fue un misionero capuchino que ejerció en la Araucanía desde 1920 hasta 1963. Su obra más conocida es la transcripción de Vida y costumbres de los indígenas araucanos en la segunda mitad del siglo XIX, obra relatada principalmente por el jefe de reducción mapuche Pascual Coña.

Me preocupa que los idiomas de nuestros pueblos originarios se van debilitando; debe hacerse un gran esfuerzo para que no lleguen a ser lenguas muertas. El mapudungun y el pascuense se han visto que se están debilitando día a día; hay fuerzas naturales que ayudan a ello; la radio y la televisión, junto al Internet contribuyen a la pérdida del idioma en las nuevas generaciones.

Importante sin duda ha sido que en la Comuna de Galvarino se haya aprobado que el mapudungun sea un segundo idioma oficial.

Ojalá que cada chileno pueda ir adoptando un idioma de los de nuestros pueblos originarios como preocupación propia; tratar de conocer su historia, sus significados y escribir sobre ello. Si es posible llegar a hablarlo.

Yo personalmente tengo un especial aprecio por la Isla de Pascua, por Rapa Nui. Hice una recolección de sus toponimias y las traduje al español, con la ayuda de diccionarios y de pascuenses. En mi página web www.rochade,cl tengo ese material presentado, que ha sido bastante leído en el mundo entero. He estado juntando material para hacer lo mismo con algunas regiones del país, algo tengo avanzado para la isla Grande de Chiloé, donde el mapudungun tiene una fuerte presencia.

Presento en seguida más antecedentes sobre estos temas.


A continuación traslado párrafo textual obtenido de la bibliografía revisada especialmente relacionada con la escritura mapuche:

La escritura del mapuche o mapudungun, lengua hablada en Chile y Argentina por el pueblo mapuche, está formada por alrededor de 15 alfabetos o grafemarios que se han usado desde el siglo XVII hasta la actualidad para registrarlo de forma escrita. Los mapuches no habían desarrollado un sistema de escritura a la llegada de los conquistadores, por lo que en principio los sacerdotes adaptaron el alfabeto español para escribir libros que les ayudaran a los misioneros a evangelizarlos en su propia lengua. Estos sistemas usaban distintas combinaciones de letras para tratar de representar los sonidos que resultaban extraños a los hablantes de castellano. En el siglo XXI están en uso siete u ocho alfabetos en el territorio chileno, de los cuales los más aceptados son el Alfabeto Unificado y el Grafemario Raguileo.

El Estado chileno promueve el uso de un alfabeto el Azümchefe que combina características de los dos anteriores y también contiene elementos nuevos. Fue creado por la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (CONADI). Es un alfabeto romano formado por 28 letras ordenadas de forma diferente a la convencional, recibe el nombre de Azümchefe (persona que enseña) o Azümchefi por sus 7 primeras letras. El orden es el siguiente: a, z, ü, m, ch, e, f, i, k, t, nh, tx, o, y, q, g, lh, ñ, r, s, ll, p, u, w, l, n, sh, t’.

El Alfabeto Unificado es un alfabeto romano con cinco adiciones (?, ?, ñ, ?, ü) y cuatro dígrafos (ch, ll, ng, tr); que fue elaborado por la Sociedad Chilena de Lingüística en 1986. Este alfabeto distingue como fonema separado la t interdental y reconoce hasta cierto punto los sonidos especiales del habla afectuosa, pero no de la despectiva. Por tanto el alfabeto unificado del mapudungun está formado por las siguientes 27 letras: a, ch, d, e, f, g, i, k, l, ?, ll, m, n,, ?, ñ, ng, o, p, r, s, t, ?, tr, u, ü, w, y.

Otro tema interesante y de discusión es la acentuación.

La acentuación tácita tiene sus características propias; unos afirman que la escritura no debe usar acentos ortográficos o tildes, otros sí. El diccionario Español – Mapuche de ese gran capuchino alemán Félix José de Augusta(nacido en Augsburg, Baviera) usa el acento ortográfico.

Sin duda que el diccionario del Fray Félix José de Augusta en 1915 ha sido la gran base de la escritura del mapudungun. La influencia germánica es notable.

Algunos antecedentes reunidos en lo que he revisado que me parecen interesantes presentar y/o comentar.

El idioma mapuche tiene varios nombres; los que lo hablan le llaman mapudungun o mapundungun («el hablar de la tierra»), mapuchedungun o mapuchezungun («el hablar de los mapuches»); chedungun o chezungun («el hablar de la gente»). Los cronistas de la Colonia lo llamaron «araucano», «lengua de Chile», «lengua general de Chile» y también chilidungu. Algunos a la palabra mapudungun, la acentúan en la última sílaba.

Este idioma tiene incorporada palabras quechuas y con la conquista española fue incorporando palabras del castellano.

Se afirma que este idioma ha tenido varios dialectos, relacionados a sectores geográficos. Se considera hoy que habría tres grandes grupos de dialectos que superviven: el picunche más al norte, el moluche-pehuenche del centro y regiones de Argentina y el Huilliche en la parte sur continental y en Chiloé como también en parte sur de Argentina. Este último dialecto tendría más influencia castellana.

Finalmente presento un Diccionario Mapuche-Español, del que hice referencia anteriormente
Fte: http://www.interpatagonia.com/mapuche/diccionario.html

El idioma mapuche o mapudungum es una lengua ágrafa, es decir no tuvo escritura.

No hay consenso absoluto entre los especialistas respecto de los signos fonéticos mas adecuados para transcribir las expresiones orales. Como regla muy general, las palabras simples terminadas en consonante son agudas, ej.: ralun, malen y las teminadas en vocal, son graves, ej.: huapi, cura, ruca.

Esta que a continuación detallamos, es solo una lista de algunos nombres originados en voces mapuches.

A
Acol: que conduce al lago.
Achen Niyeu: lugar que estuvo caliente.
Acun: finalizar.
Acutun: volver.
Aila: nueve.
Ailinco: agua que corre sobre «cascajo».
Alicura: piedra blanca como la leche. Alumco: refejo en el agua.
Alumine: reluciente en el fondo (abajo).
Andacollo: (del quechua) lo mejor entre los minerales.
Antuco: agua del indio.
Aucapan: pumas alzados.
Auquinco: agua que resuena.

B
Bandurria: ave migratoria.
Bio Bio: canto del pajarito fio fio.
Botacura: roca grande.
Bucalemu: bosque grande.
Buraleo: río con numerosas corrientes. Butaco: arroyo grande.
Butamalal: corral grande.
Butamallin: pantano o mallín grande.
Buta ranquil: pastizal grande cerca de los ríos o lagunas.

C
Caburga: utensilio para moler la pulpa de las manzanas.
Cacha: adorno.
Cachil: canto rodado.
Cachipampa: salar.
Cahuil: gaviota.
Cahuin: fiesta, borrachera.
Calafquen: lago como mar.
Calbuco: agua azul.
Caleu Caleu: numerosas gaviotas.
Caleuche: gente transformada.
Calfu: azul.
Calfun: aguilucho azul.
Calfupan: puma azul.
Calfuquen: pedernal azul.
Calihue: lugar solitario.
Calquin: águila grande.
Calquinco: arroyo del aguila grande.
Calle calle: abundanci de plantas iridaceas similares al lirio, cerca del río homónimo.
Callen: río solitario.
Cancagua: asaro o brasero de piedra.
Cangcatun: asar.
Carelhue: lugar verde.
Carilafquen: lago o laguna verde.
Carileufu: río verde.
Carirriñe: colihue verde.
Catanlil: peña perforada.
Catapilco: valle encajonado.
Catriel: marcado, cortado.
Caulin: rasguñar, arañar.
Caupolican: piedra pulida dura como el pedernal. Cauquen: especie de ganso silvestre.
Caviahue: lugar de encuentro o de fiestas.
Cayu: Seis.
Co: Agua, arroyo.
Coinco: agua del arenal.
Coipo: nutria salvaje.
Colicura: piedras coloradas.
Coli, calu: color pardo, moreno.
Colo colo: gato montés.
Collico: agua colorada.
Collicura: río de piedras coloradas.
Colloncura: máscara de piedra.
Coñaripe: sendero de Los guerreros.
Copahue: lugar de azufre.
Copihue: planta trepadora y flor de los bosques andinos.
Coquimbo: posada de la playa.
Corel: arena.
Coyanco: arroyo del roble.
Cullén: lágrimas.
Cume: bueno.
Cunco: agua morena.
Cuncumen: murmullo de agua.
Curi: oscuro o negro.
Curico: agua oscura.
Curu-curru: negro.
Cutral co: arroyo de fuego.
Cuyen: luna.
Cuyum: arena.
Cuyumhue: lugar arenoso.
Cuzco: omblibo, centro.

CH
Chaan: piernas.
Cahcai: arbusto espinoso también llamado michai.
Chacaico: chicha de chacai.
Chacay: amarillo, espino.
Chacayal: monte de espinos.
Chacha: saludo.
Chachai: papito.
Chadi: sal.
Chaica: balsa.
Chaitun: filtrar colar.
Chalintecun: encargar, entregar.
Challa: olla
Chamay, Chanuay: aros.
Chapeco: arroyo o lago con forma de trenza de mujer.
Chapel: argusto de lugares húmedos. Chapelco: arroyo del chapel.
Che: gente.
Chemehuin, chimehuin: lugar de viviendas.
Chenque cura: piedra de cementerio.
Cheuque, choique: avestruz.
Chilca: planta de romero.
Chilla: montura.
Chillca: escritura, carta, libro.
Chiloe: isla de gaviotas.
Chichin: arbustos siempre verdes de madera dura, Llamas » aromas del campo».
Chucaro: duro.
Chumpiru: sombrero.
Chuquin: robar.
Chuy chuy: frío.

D
Dalcahue: lugar de piraguas.
Dengo: noticia, asunto.
Diuco: agua clara.
Diuqin: ave de rapiña. Domullo: Su significado se discute, puede querer decir: sumidero, pecho de mujer, nariz de mujer, cualquier punta, o filo.

E
Ela: tres.
Elcun: hacer testamento.
Elo: cerco, tapia.
Elpicon: regar.
Eltun: enterrar, sepultar.
Elun: entregar, ceder. Entrequen: ceniza.
Epu: dos.
Epu mari: veinte.
Eyeu: allí, allá.
Eyetun: gemir, sollozar.

F
Faraleufu: río de región nevada.
Filo Hua Hum: este nombre deriva de Filohuhum, un legendario cacique, que antes de claudicar ante los conquistadores, se convirtió en piedra. Futaleufu: río grande.
Futrone: lugar de humareda.

G
Guaico: charco.
Guaimallen: muchacha joven, doncella.
Gualmapu: en la proximidad de la tierra.
Guapi o huapi: isla, tierra aislada pro ríos o quebradas. Guatrache: gente gorda.
Guluche: araucano chileno.
Gunei: astuto.
Guor, guer, guru: zorro.

H
Huaca: vaca.
Huacaco: arroyo de la vaca.
Huecu: hongo microscopico del coirón blanco.
Huechelu: gente nueva.
Huechulafquen: lago alto, laguna de la punta.
Huelemu: bosque recién plantado.
Huelen: mala suerte.
Huellelhue: lugar para nadar. Huemul: ciervo pequeño, especie de gamuza, que habita Los Andes.
Huenu: lo que está alto.
Huepil: el arco iris.
Huerquehue: lugar donde se cazan guanacos.
Hueyeltue: donde se puede nadar.
Huiliches: gente del sur.
Huinca: extranjero, no pertenenciente a la zona propia de Los araucanos.

I
Icalma: muy peñascoso.
Imul: rodar.
In: comer.
Inacayal: cosa vieja, voz quechua. Incahuasi: casa del inca.
Isique: insecto.
Itahue: lugar de pastoreo.

J
Jaña: respuesta.

K
Kayu: seis.
Ke: hígado.
Keñi: cinco. Kiñe: uno.
Kopawe, copahue: azufre, lugar de azufre.
Kula: tres.

L
Lácar: lago revoltoso que causa miedo.
Lafquen, lauquen: mar.
Lahuen có: agua medicinal.
Lancuyen: eclipse de luna.
Lanín: verbo de la primera persona del plural que quiere decir «nos hundimos». También «roca muerta».
Lauquen: lago o laguna.
Lautaro: ave de rapiña.
Lemu: selva, bosque.
Lemu Cuyén: bosque arenoso.
Li: roca.
Lican Ray: piedras revueltas. Lihuen: luz.
Lil: peña, peñasco.
Liuco: agua clara.
Limay: río claro.
Liucura: Piedra blanca y lisa. Llacantu: collares.
Llohue: reducción o caserío. Llaima, gaima: desaguadero, zanja, valle.
Llal: viuda.
Llanquihue: lugar hundido o lago escondido.
Llequehue: lugar abandonado.
Liquiñe: ojos lagrimosos.
Loan: guanaco.
Lolen: foso, zanjón.
Lolog: suelo con hoyos o depresiones.
Lonco: cabeza.
Lonquimay: monte tupido.
Luanco: arroyo del guanaco.
Lupi: pluma.
Luvur: bagre.

M
Machi: curandera. Intermediaria entre la gente y el mundo de los espíritus.
Mahuida: sierra, montaña.
Maile, mailen, malen: doncella, jovencita, niña.
Maiten; hermoso árbol de hoja apetecida por el ganado, voz mapuche españolizada.
Malal: corral.
Malalhue: lugar de los corrales.
Mallín: terreno donde se estanca el agua de lluvia.
Mana: milagroso manjar que envió Dios a los israelitas en el desierto.
Mamuilmalal: cerco o corral de madera.
Mapu: país, lugar, tierra.
Mapuche: gente de esta tierra.
Mara: liebre patagónica. Mari: diez.
Mari mari: Literalmente diez. Saludo de los mapuches que corresponde a buen día.
May: bueno.
Maya: río.
Meli: cuatro.
Menetue, menelhue: lugar para bañarse.
Menuco: pantano.
Michai: arbusto espinoso con cuyos frutos se elaboran dulces, voz mapuche españolizada.
Molle: árbol grande y hermoso, sagrado entre los incas.
Moluche: gente de donde se pone el sol.
Moquehue: donde hay maqui.

N
Nahuel: tigre.
Nahuel Huapi: isla del tigre.
Nalca: planta comestible.
Namuncura: piedra con forma de pie.
Nauco: arroyo que baja.
Nahuen: firmeza, energía.
Neltume: irse libremente. Neuquén: corriente fuerte, arrollador, pujante.
Nguenchen: dios creador.
Nguilleo: piñon, fruto del pehuen.
Nguillatun, nillantun: hacer rogativas. Constituye la ceremonia mas importante de los indígenas.
Nompuehuenu: al otro lado del cielo.

O
Ojanco: río dividido en ramales.
Ollagua: bella vista.
Ona: una de las tribus de indios fueguinos.
Oñaupe: veneno. Oñoico: estero o corriente con muchas vueltas y curvas.
Oñoquintue: mirar hacia atrás.

P
Pachama: vestido viejo.
Paiguen, paihuen: forma verbal que significa «estar en paz».
Paila: de espaldas.
Paillalco: agua tranquila.
Paimun: huérfano de afecto.
Palguin, palquin: arbusto medicinal.
Panguipulli: cerro del puma.
Panqui: cachorros de puma.
Pehuenco: arroyo de los pinares.
Pellaifa: sitio escarchado.
Pellipulli: cerro alto.
Peñi: hermano.
Perihueyco: pozón de agua.
Petrehue: incendio.
Peuma: ilusión.
Peumayen: lugar soñado.
Picun: norte.
Picun leufu: río del norte.
Pichi: chico, pequeño. Pichimalal: pequeño corral.
Pichimavida, pichimahuida: monte pequeño.
Pichin: poco.
Pichinco: poco agua.
Pichitrutruca: instrumento musical.
Pilolai y Pifilca: instrumentos musicales mapuches.
Pilpil: cuidar, atender bien.
Pirehueico: mancha de nieve, pozo de nieve.
Piren: nevar, nieve.
Pitren: jarra de cercámica asociada a ajuares funerarios.
Pucará: poblaciones, fortalezas, lugar fortificado.
Pucon: vasija de arcilla, entrada.
Puelo: que está en el este, situado al este.
Pulmahue: hacer bien una cosa.
Pulmari: hacer diez veces una cosa bien hecha.
Purra: ocho.
Puyehue: agua donde abundan los puyes (pequeño pez de lagos y ríos, comestible y parecido a las sardinas).

Q
Quechu: cinco.
Quechuquina: martin pescador.
Quelhue, quelihue: tintura roja.
Quellen: frutilla.
Quellon, quillon: ayuda, auxilio.
Quemquemtreu: pendiente fuerte.
Queñi: pajonal.
Quetralco, cutralco: literalmente «arroyo de fuego».
Quetrihue: donde hay arrayán.
Quetrupillán: volcán mocho.
Quichra: pipa de fumar.
Quillaco: arroyo de las quilas. Quilacoyan: tres robles.
Quila Quina: tres puntas.
Quilquihue: lugar de enredaderas.
Quillehue: lugar de las lágrimas.
Quillen: lagunitas que se forman en el invierno, tirar con flechas.
Quiñe: uno.
Quinchahue: lugar emparejado o donde se juntan dos cosas.
Quintral: estar emparejada una cosa con otra.
Quiyan: acosar.

R
Rahue: lugar arcilloso o gredoso.
Raihuen: boca florida.
Ranco: arroyo de las apuestas.
Rehue: lugar sagrado exclusivamente reservado para las ceremonias religiosas.
Ralí: plato de madera.
Reloncavi: fiesta en los valles.
Relonche: habitantes del valle. Relque: siete.
Renalhue: cementerio.
Rucalhue: lugar destiando a construir una casa nueva.
Rucamalen: casa de niña.
Ruca Ñire: cueva de zorro.
Rüfüwe: cucharón de madera.
Rupanco: fluir de las aguas.
Rutur: pasar al lado, cerca.

S
Sangcul: amasar.
Sayi: fruta.
Sefolla: cebolla.
Saihueque, Sayhueque: cacique Valentín «Shaihueque».
Sechu: el duende. Serfin: cuidar servir.
Siquil Shiquil: adorno de plata de las mujeres araucanas.
Sotaqui: muy extenso.
Suran: jurar.
Suyai: esperanza.

T
Tahiel: canto sagrado.
Tapilhue, trapilhue: sitio donde se cultiva el ají, ajizal o ajial.
Temuco: agua o arroyo del temu.
Til til: desnudo, estéril.
Trabun: estar unidos.
Trabunco: encuentro de aguas.
Traful: confluencia.
Trancura: piedra caída.
Tomen: totora (planta).
Toquis: hachas de piedra. Traitraico: agua que cae con ruido.
Trantrapiwe: mortero.
Trapelacucha: pectoral.
Trompul: Chueco, torcido.
Tucapel: apoderarse por la fuerza de algo.
Tunquelen: paraje o lugar de reposo.
Tupu: prendedor cuya cabeza circular es de plata cincelada y largo alfiler , con el cual la mujer se prende el rebozo con el vestido.
Tuqueco: arroyo del palo muerto.
Tutun: tomar algo prestado.

U
Ucun: quedarse.
Uhueco: arroyo despoblado, soledad.
Ulpo: bebida elaborada con harina tostada y agua fría.
Umaln: hospedar.
Une: adelante.
Unguelén: olvidar. Uniquen: hay camarones.
Uñan: amante.
Uñum: aves.
Upeo: olvido.
Urumen: desmayarse.
Uwa: maiz.

V
Valcheta: Valle angosto.
Veinentun: aprobar.
Velehuen: resultar.
Veyentun: convenir.
Vichuquen: lugar muy aislado. Villantun: padecer miseria.
Viravira: yerba de la vida.
Viruco: arroyo de agua fría.
Vuta cura: piedra grande.
Vuta leuvu: río grande.

Y
Yafu: duro.
Yal: hijo, descendiente.
Yali: zancudo, mosquito.
Yampai: resplandor.
Yanquen llaunquen: invitar a una comida.
Yapa: lo que se da sin obligación, que se regala.
Yapai: brindar.
Yarquen: lechuza.
Yavu: robusto, fuerte.
Yene: ballena.
Yepan: llevar. Yeumen: ágil.
Yevaltum: encargar.
Yicoi: temer.
Yuco: de «Yucón» afilado.
Yuculcu: anillo, pulsera.
Yuen: ciervo.
Yuli: pejerrey.
Yumbrel: el arco iris en todo su esplendor.
Yunyay: valle templado.
Yupi: hombro.

Z
Zapala: pantano mortal. Zapallo, zapallu: voz quechua, la calabaza. En mapuche «penca».

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