Nuevamente nos enfrentamos al fenómeno económico de que cuando sube el precio internacional del cobre, baja el valor de la divisa; con ello se daña fuertemente la economía nacional. Se abaratan los precios de los productos importados y se rebajan los ingresos de las actividades productoras de bienes y servicio exportables.
Se generan a su vez fuertes diferencias en la situación económica de las distintas regiones del país. Mejoramiento de las situaciones de las regiones productoras de cobre y se dañan los ingresos del resto del país.
Parece que en Chile no se tiene en consideración que cuando exportamos minerales lo estamos haciendo a costo de reducción de nuestro patrimonio nacional. Las divisas captadas por sus exportaciones deberían ir principalmente a hacer inversiones, que neutralicen la descapitalización nacional provocada por sus exportaciones.
En un artículo anterior me referí bastante a este tema, reconociendo el buen proceder de Dubai, emirato que destinó parte importante de los recursos financieros obtenidos por sus exportaciones de petróleo y de gas, que estaban agotando a futuro sus reservas, a hacer grandes inversiones que han conducido a un extraordinario auge de ese emirato.
Insisto en que el país tenga una adecuada política cambiaria. Tenemos la realidad que parte importante de nuestras producciones van a los mercados externos y una alta proporción de los bienes que importamos van tanto para nuestros consumos e inversiones.
Estimo que sería conveniente estimar cuales deben ser los valores de la divisa para un mejor desarrollo del país. Para ello lograr que el valor del dólar no se aleje mayormente del deseado.
Para ello debería por ejemplo el Gobierno, posiblemente a través del Banco Central, comprar la divisa para que esta no sobre descienda de los mínimos deseados y, por lo contrario, vender divisas para evitar que el valor de ella supere el máximo recomendado.
No puedo dejar de señalar mi preocupación por la política del Banco Central reflejada en la votación de la comisión encargada de calcular la sobretasa necesaria para enfrentar el dumping de China para colocar su acero en el país, en que su representante votó en contra de establecerla y por lo tanto aparece respaldando indirectamente la paralización de la siderúrgica nacional de Huachipato, que se estimaba habría generado unos 22 mil desempleados. También llama la atención que el representante de la Fiscalía Nacional Económica votara en contra, en circunstancia que el dumping es un procedimiento que hace fuertemente imperfecto al mercado.
Se suma a lo negativo de lo anterior, la demora de la Comisión en dar su fallo, lo que originó fuertes pérdidas empresariales y con ello una reducción en la captación de impuestos fiscales.
Es preocupante lo que se pueda presentar con los futuros ingresos dela explotación del litio.
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