He escrito varios artículos criticando el uso de buses de dos pisos en carreteras y al parecer permitiendo velocidades hasta 100 Km/h.
Existen varios casos de accidentes anteriores con fallecidos y heridos graves, por lo menos en un caso no tuvo mayor explicación ya que fue en camino plano recientemente iniciado el viaje, como ha sucedido en este reciente accidente. No sería porque se duerme a adormece el conductor.
En este caso se destaca el alto porcentaje de personas afectadas. En el bus iban 52 pasajeros, supongamos que dos conductores y uno más de atención, son unas 55 personas. De ellas 6 fallecidos, más de 45 heridos de los cuales 6 graves. De ello se desprende que un muy bajo porcentaje es de ilesos, serían unos 5 o 6, como un 10% solamente. Tener en cuenta que fue un accidente en terreno plano,
Lo he señalado en oportunidades anterior que en varios países se ha prohibido su uso en carreteras.
Se sabe que su estructura es más débil, para evitar el exceso de peso. Por otra parte tienen su centro de gravedad más alto, el que sube más con la mayor carga de pasajeros que va en el segundo piso. Tiene mayor riesgo de volcarse no solo por lo anterior sino que además por tener mayor superficie para enfrentar vientos laterales, especialmente ráfagas. Además al volcarse cae con más violencia, afectando en mayor grado a los pasajeros del segundo piso que caen con mayor velocidad por su ubicación a mayor altura.
Posiblemente también se reduzca la superficie de adherencia al suelo en relación a la masa que se desliza.
Es inaceptable desde una mirada social que se permita el uso, cada vez más generalizado, por la mayor rentabilidad material que se le saca a este tipo de trasporte, con un conductor que atiende a más pasajeros y seguramente una economía de gasto de combustible y lubricantes por cliente atendido.
Esto parece asociarse a lo sucedido con la planta de agua potable de Osorno, la que queda con una atención nocturna de una sola persona y más encima se tiene un motor de generación eléctrica para hacerlo funcionar diariamente a las horas en que la electricidad del exterior tiene mayor costo. Todo ello destinado a bajar costos y a superar las ya altas rentabilidades obtenidas. Parece increíble que no se tenga un sistema automático que impida que el rellenado se paralice de inmediato en los niveles deseados.
Es de esperar que el Gobierno reaccione; que el ministerio de Trasporte atienda esta situación. Cada vez tenemos profesionales con más postítulos y más posgrados, con mayores especializaciones específicas y más se conocen las experiencias externas, etc.
A mí me llama la atención la exhibición de la Ministra mostrando los buses eléctricos y más reciente los a gas y no preocuparse aparentemente de este tema de los buses de dos pisos, como tampoco que exista en ese ministerio la preocupación por el control de velocidades en caminos y carreteras.
Los accidentes por alcance son cosas serias,
Los porcentajes de violación de esos máximos son impresionantes, lo he apreciado personalmente en la Avenida Pedro Aguirre Cerda (Camino a Melipilla) como también en otros caminos como al de Lonquén. Para qué decir el incumplimiento de los distanciamientos con el vehículo anterior.
2 respuestas
Tiene razón, y que susto porque yo viajo siempre al sur en bus de dos pisos porque no hay más opciones de buses en viajes largos. También falta fiscalización de velocidad, de uso de cinturón, de estado de los buses, turnos de los choferes…etc. Deberían preocuparse más de aquello. Hace poco me tocó uno de los choferes que estaba en un estado de ira máxima, parecía drogado, discutía con los pasajeros y lanzaba los bolsos con violencia. Tuvimos que viajar con él en ese estado tan alterado y me fui todo el viaje muy asustada. Seguiré revisando su blog a ver qué hay sobre plantas medicinales. Saludos
31 de julio de 2019
Carolina: Es grave ver como aumenta la proporción de buses de dos pisos. Por otra parte uno capta lo poco que se controlan velocidades. Esperemos que resultados se dan sobre las causas del último accidente, si es que se dan. Se está dando más respaldo a prohibir el uso de buses de dos pisos en carreteras; desgraciadamente estos aumentan, lo que hace más difícil su prohibición.
Atentamente. Rolando