Rolando Chateauneuf

Desde 1975 hasta mediados de los años 90 estuve muy relacionado con el tema de las políticas nacionales de alimentación y nutrición. Tuve la oportunidad de trabajar en varios países de América Latina como también estar ligado a estos temas en actividades universitarias especialmente en el INTA y en la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la Universidad de Chile. He podido observar cómo ha variado el abordaje del tema y la ampliación de conocimientos sobre estas materias.

El estado nutricional del individuo y de la sociedad son materias muy importantes tanto para el tratamiento individual como para los temas de políticas, especialmente en Salud Pública.

En el artículo se describen y analizan temas sobre estado nutricional y especialmente sobre obesidad y en especial sobre obesidad abdominal.

Las enfermedades nutricionales pueden ser como bien se sabe por déficit o por excesos. Chile fue muy afectado por los problemas por déficit, los que se fueron superando y ya prácticamente han desaparecido en las prioridades de la Salud Pública; pero han ido haciéndose más presentes los problemas por exceso, el sobrepeso y la obesidad.
En los comienzos recuerdo que mucho se usaban las medidas antriopométricas simples. Básicamente las de altura y peso, las que se relacionan indiscutiblemente con la edad.

El problema se detectaba y detecta principalmente por las relaciones
Peso edad, peso altura y altura edad.

Peso altura refleja el estado nutricional presente, altura edad informa del estado nutricional especialmente del pasado. La desnutrición desde la situación de la madre y en los primeros años de vida afecta a la altura futura del ser; lo que se pierde en los primeros años después no se recupera.
La relación peso edad, combina estado nutricional pasado con presente. Puede darse que un caso de peso deficiente para edad, esté asociado a una situación de sobrepeso actual.

Otro indicador importante ha sido el peso al nacer, que debe considerarse para un recién nacido que ha tenido un período de gestación normal. Es un muy buen indicador para salud pública. Se ha observado que en períodos de crisis económica se ha dado una disminución del valor de este indicador. Por ello es un buen indicador para la vigilancia alimentaria nutricional.

Para todas estas mediciones existen tablas de referencia para apreciar el estado desde desnutrido, a normal y a sobrepeso, obesidad en sus dos grados.

También en estudios de poblaciones de menores se usaba la circunsferencia braquial, como un método muy simple y rápido de medición y registro.

Posteriormente he visto aparecer el tan conocido actualmente Índice de Masa Corporal (IMC), que se calcula por el cuociente entre peso en kg Y el cuadrado de la altura, expresada en metros. Por ejemplo una persona que pesa 75 kg y mide 1,73 m, tiene un indice 25, que se considera como límite superior del peso normal de la persona.
1,73 al cuadrado da el valor aproximado a 3.(2,99). El índice se obtiene del cuociente entre 75 y 3, que es 25.

Es importante disponer de la tabla que nos informa de los límites para calificar un estado nutricional. Se hace una pequeña diferencia entre hombre y mujer

———– Bajo peso — Peso normal — Sobrepeso — Obesidad — O. mórbida
Hombre < 20 ---- 20 a 25 ---- 25 a 27,5 ------ > 27,5 —— >39
Mujer —Idem H —- Idem H —— 25 a 27,3 ———->27,3 ——– >39

La obesidad actualmente en el mundo como también en Chile, es uno de los problemas de salud pública más importante, no sólo por los niveles a los cuales nos encontramos, sino que también por su tendencia a agudizarse.

Se habla que la obesidad trae como consecuencia la llamada tríada de enfermedades derivadas: diabetes, hipertensión arterial y ateroesclerosis. Además de infartos al corazón y ciertos tipos de cáncer que se van haciendo más general, los de mamas en mujeres y próstata en hombres

La obesidad se puede clasificar en dos:
Obesidad periférica o ginoide, con grasa acumulada especialmente en glúteos, muslos y brazos.
Obesidad abodominal, central o androide, con grasa acumulada especialmente en el abdomen. Son los conocidos “guatones” o “guatonas” (barrigones y barrigonas).

Es importante saber de qué obesidad se trata. Es bastante más riesgosa la obesidad abdominal, aumenta con ella el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes y gota; los que la padecen tienen altas probabilidades de acumular grasa en otros órganos vitales, causantes de enfermedades cardiovasculares, como la hipertensión arterial. Superarla o evitarla es muy importante para el funcionamiento normal del corazón, de los vasos sanguíneos, del metabolismo en general, del sistema óseo y de otros órganos. El colesterol alto, la intolerancia a la glucosa y el nivel alto de triglicéridos están también asociados a esta obesidad.(Síndrome metabólico).

Expertos señalan que el exceso de grasa abdominal es la génesis del riesgo metabólico. En muchos casos, aparece primero la obesidad y después la diabetes.

También se relaciona con la insuficiencia cardiaca, los accidentes cerebrovasculares e incluso con la muerte súbita.

La grasa abdominal, según estudios más recientes, estaría relacionada con la aparición del cáncer de colon.

También hay referencia a que la medición de la obesidad por el perímetro abdominal en un mejor indicador, ya que el IMC se puede ver afectado por el que el individuo tenga más músculo, lo que eleva el indice sin que ello refleje más obesidad.

¿Cómo se aprecia la existencia de la obesidad abdominal?
El método es muy sencillo. Basta con medir el perímetro abdominal y compararlo con una referencia. Para una buena medición, la persona tiene que estar de pie, desnuda, tomar la medida a la altura del ombligo después de haber expulsado el aire.
En cuando a la circunferencia límite no hay unanimidad. Una fuente la establece en valores más precisos en 88 cm para la mujer y el 102 para el hombre; otra fuente simplifica el límite y lo deja en 90 cm para la mujer y el 100 para el hombre. Otros usan loa 105 cm. como referencia para hombres.

¿Cómo evitar la obesidad abdominal?
Las dos bases fundamentales contra toda obesidad es mejorar la ingesta de alimentos y mayor actividad física, ejercicios físicos en forma regular. Comer menos alimentos, mejorar la composición de la dieta y su distribución en las comidas del día. El tema podría extenderse bastante. No es la oportunidad para hacerlo.

Lo que ha dado buenos resultados es el consumo de la leche de alpiste. Hay varios artículos en esta página sobre el alpiste y mucha información aportada por colaboradores que señalan experiencias tenidas.