Es sin duda un tema preocupante, que puede originar efectos negativos en la captación de futuros ingresos nacionales de capitales externos en calidad de préstamos o inversiones directas. Además es muy probable que esta materia repercuta en que las empresa aseguradoras castiguen a futuro los montos de jubilaciones garantizadas de por vida.
Interesante artículo publica el diario El Mercurio en primera página de su Cuerpo C, de la edición del reciente 15 de octubre. A mi juicio su ubicación y su título son muestras de la importancia que el decano de la prensa chilena le da al tema. La autora del artículo es Paula Gallardo S.
Su título fue “Rentas vitalicias: Principal inicia consultas con Cancillería, apela a TLC con Reino Unido y EE.UU”. Inmediatamente antes del titular va en letras de menor tamaño lo siguiente: “Compañía, que se suma a las acciones interpuestas por Ohio y Zuric, además alertó debate de segundo anticipo”. Parece conveniente señalar que Principal es una empresa extranjera en la que su nombre completo es Principal Financial Group; ella se desempeña en grado importante en el área de los seguros.
En letras menores al del título del artículo, pero mayores a la parte extensa de su contenido se expresa lo siguiente: Desde la Cancillería chilena señalaron que están analizando el contenido de las solicitudes y evaluando si están “frente a la existencia de disputa entre el Estado de Chile y reclamantes extranjeros amparados” en tratados internacionales.
Respuesta bastante diplomática pero que a mi parecer es más bien dilatoria.
Otros dos componentes que se destacan en la publicación. Uno que señala “Principal está seriamente comprometida a buscar una solución amigable a la disputa. No obstante, se reserva todos los derechos de iniciar una resolución del conflicto contra Chile bajo las leyes internacionales” por parte de Principal. El otro es la respuesta de la Cancillería: “El ministerio de RR.EE. cumplirá con su obligación legal de asesorar y proponer acciones, lineamientos y otras medidas específicas al Presidente de la República para la coordinación, defensa y representación del Estado”.
Da la impresión que se está en un proceso dilatorio sobre una materia bastante delicada, que extraña que se haya generado en un Gobierno de Derecha. Puede. en mi opinión, explicarse este actuar del Gobierno, al deber que tener enfrentar un populismo que ha conducido al Parlamento chileno a pronunciarse por tan extrema decisión por amplias mayorías.
Iniciando la parte principal del artículo viene textualmente lo siguiente:
“Mientras en el Congreso se sigue discutiendo un segundo anticipo desde las rentas vitalicias, la matriz extranjera de la compañía de seguros Principal solicitó a la cancillería chilena el inicio de consultas por el anticipo aprobado en abril, acusando una eventual vulneración de tratados internacionales y dejando en claro su preocupación por el nuevo proyecto en debate”.
Esos tratados serían dos. El primero con el Reino Unido en 1996 y el segundo con EE.UU en 2006. La queja de Principal se suma a la que ya han presentado Ohio Nacional y Zurich(Chilena Consolidada) que se encuentran en consulta con Cancillería.
Debe tenerse presente que entre los pasos que deben seguir los reclamantes está primero la consulta para después seguir con la petición de arbitraje.
Algo preocupante señala el artículo es que Principal reveló haber enviado una carta al Presidente Piñera de fecha 10 de junio de este año expresándole preocupación frente al primer anticipo aprobado y sobre otras materias relacionadas, comunicación que hasta la fecha no ha tenido respuesta. Principal habla de violación a los tratados internacionales; además se ha señalado que una nueva aprobación ocasionará un daño irreparable a las compañías de seguros, incluyendo a Principal. Más importante aún, el proyecto podría ocasionar que las compañías se vean imposibilitadas de cumplir sus obligaciones contractuales (con sus pensionados) y regulatorias”.
El artículo de El Mercurio en análisis hace referencia especial a la posición de Chile.
Señala “Desde la Cancillería comentaron que,´considerando la intención del Estado de cumplir a cabalidad los compromisos internacionales asumidos, el Ministerio de RR.EE se encuentra analizando el contenido de las solicitudes y determinará a través de la institucionalidad vigente, si nos encontramos frente a la existencia de disputas entre el Estado de Chile y reclamantes extranjeros amparados por los tratados internacionales antes mencionados, y de ser el caso, el procedimiento a seguir´”. A lo anterior, la Cancillería habría agregado que “el Ministerio de RR:EE. cumplirá con su obligación legal de asesorar y proponer acciones, lineamientos y otras medidas específicas al Presidente de la República para la coordinación, defensa y representación del Estado en relación a cualquier eventual controversia”.
La controversia suscitada puede llegar al arbitraje del CIADI, sigla del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones extranjeras. Este es un organismo público internacional creado mediante el Convenio sobre Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones entre Estados y Nacionales de Otros Estados. Corresponde a un tratado multilateral celebrado en 1965.
Finaliza el artículo de El Mercurio con el siguiente párrafo: “Respecto del escenario que se abre desde ahora, Felipe Ossa, experto en arbitraje internacional y socio de Claro y Cía, señaló que previo a un arbitraje ante el CIADI, deben pasar por un período de negociaciones, que puede ser de seis meses (TLC con EE:UU) o de tres meses (Tratado de Inversión con el Reino Unido), las aseguradoras pueden recurrir a tribunales arbitrales internacionales”.
Los antecedentes anteriores señalan de alguna manera que los conflictos suscitados se prolongarán hasta el nuevo Gobierno, de manera que apenas se produzca la elección del nuevo Presidente de Chile, va ser conveniente que se genere un trabajo conjunto de representantes de los dos gobiernos, el saliente y el entrante.
Para finalizar, mi opinión es que estamos enfrentando una situación muy crítica tanto por el retiro anticipado de depósitos como en lo que es más delicado, las decisiones tomadas desde ya de obligar a las aseguradoras a entregar fondos a los asegurados más allá a los pactados entre particulares, asociado a ello la rebaja de las pensiones futuras. Esto posiblemente lleven a la quiebra a las aseguradoras lo que obligará al Estado a pagar las pensiones futuras que están garantizadas por él.
Es de temer que el Estado deje de cumplir estas garantías lo que inquieta desde ya a los actuales pensionados como también a los futuros que se verán motivados a retirar de la AFP el máximo de lo permitido.
Además lo que ya se ha establecido y que se pretende ampliar, afecta directamente al patrimonio de las aseguradoras, lo que podría tener características de expropiación parcial patrimonial.
Con lo que está sucediendo, se perjudica la imagen del país en el exterior, quizás como jamás se habría antes generado, máxime si esto se produce en un Gobierno considerado de Derecha. Qué se puede esperar de un futuro gobierno de Centro o de Izquierda.
No parece caber duda de lo trágico que está sucediendo es resultado de un populismo nefasto que se está manifestando en nuestro país, especialmente en nuestro Congreso. Una encuesta señalaría que el 58% de los electores no votarían por parlamentarios que estén en contra de nuevos retiros. Ello contribuiría a que muchos parlamentarios que postulan a la reelección voten a favor de los retiros, aunque algunos de ellos se hayan manifestado anteriormente en contra. Algo similar se aprecia entre algunos candidatos a la Presidencia de la República.
Lo que está sucediendo, por otro lado, debería estar perjudicando el ingreso de nuevas inversiones extranjeras y desde luego una desvalorización del peso chileno que se representa por el aumento del valor de la divisa, para nosotros especialmente del dólar. Esto último agudiza la presión inflacionaria ya existente.
Desgraciadamente los retiros de dineros de las AFP han generado un cambio de las reglas del juego establecidas originalmente, obligándolas a ventas mayores a las programadas en normalidad y ello ha contribuido a caída de valor de las colocaciones con la consiguiente desvalorización de los fondos especialmente de los que estaban en inversiones de menor riesgo, en que se recomendaban que entraran los próximos a jubilar. Ha contribuido a estas caídas del valor de los fondos la inflación derivada de varias causas entre otras la expansión anormal de la demanda por el reparto de dineros. Es posible que la situación se haga más adversa al subir el valor del dólar, y posiblemente por una mayor colocación de recursos financieros en el exterior, por inversionistas que buscan reducir riegos. El alza del dólar favorece el avance de la inflación, especialmente por la elevación del precio de los bienes transables internacionalmente ya sea de exportación como especialmente de importación.
