Rolando Chateauneuf

Ya inicié en mi página web www.rochade.cl en mi último artículo la categoría “China” como una de las que se iniciaba, fue como un nacimiento muy marginal. Ahora las inicio de manera más formal.

Me lleva a su creación como “categoría” por dos grandes razones, una es la importancia que ha llegado a tomar este país al nivel internacional, como en mi opinión ser la nación más importante en el mundo en sus niveles económicos y de poder político y la otra por la alta relación especialmente económica que se ha llegado a establecer entre estos países, China y Chile, tanto en lo comercial como en los aspectos financieros, especialmente en inversiones.

Junto a lo anterior, se destaca China por su crecimiento actual y por su futuro desarrollo bastante integral.

Hay aspectos que pueden considerarse positivos y otros negativos para Chile. Se plantean muchas inquietudes a favor o en contra de lo que está sucediendo.

Algunos podemos posiblemente a pensar que esta expansión y su gran poder internacional pueden ser preocupantes para Chile.

Hoy es un encuentro entre dos países con estilos actuales de desarrollo muy distintos. China a mi juicio tiene una política de desarrollo de extraordinarias cualidades, con gran visión de futuro, en cambio Chile está dominado por una visión muy estrecha basada fundamentalmente en el monetarismo de corto plazo, con un destino muy poco claro, con una profunda crisis social y económica. Carecemos de una política cambiaria y de empleo. Vemos un debilitamiento del importante sector industrial manufacturero, una tendencia al debilitamiento del empleo formal y a una carencia de visión de futuro. La desigualdad en la distribución del ingreso y la riqueza se agudiza, paralelamente a una delincuencia creciente, con preocupante la presencia infantil y la de las drogas en sectores muy amplios de la población.

Chile en el pasado tuvo un estilo distinto al actual, el que existió en la antigua democracia, antes del Golpe Militar. Su estilo tuvo algunas semejanzas con el actual de China.

Su estilo, a pesar de ese país tener un solo partido de gobierno, el comunista chino, se distancia de un país netamente comunista. Tiene una importante presencia del capital privado y de las empresas privadas, muy protegidas internacionalmente por su gobierno.

La políticas actuales chilenas parecen incapaces de mejorar nuestra situación, lo que se agudiza con la pandemia que enfrentamos.

En las relaciones de Chile con China se están produciendo serias inquietudes. Primero derivadas de los resultados del comercio recíproco y más recientemente con las inversiones extranjeras chinas en la adquisición de empresas estratégicas de la economía y la sociedad chilena.

Personalidades importantes, más bien de derecha, han manifestados inquietudes sobre el tema, basadas entre otros argumentos en la reacción de China ante acciones de Australia para enfrentar delicadas situaciones internas dirigidas a la defensa de intereses del país oriental, por sobre enfoques más nacionalistas. Frente a ello el país asiático ha demostrados asumir represalias comerciales.

Dos opiniones se han hecho sentir en Chile contrarias a poner limitaciones al ingreso de capitales chinos a Chile. Uno ha sido la del actual Ministro de Relaciones Exteriores de Chile y la otra la del ex Presidente de nuestra nación, en publicación en primeras páginas de El Mercurio, Eduardo Frei Ruiz Tagle, con posiciones tan distintas a las de su padre.

Estas posiciones trataré de analizarlas en artículos posteriores.

Hay derecho a pensar que podemos hoy estar llegando a problemas geopolíticos.

Ha sido impresionante para muchos la tremenda flota pesquera china que extrae en aguas internacionales casi al borde de nuestras aguas marítimas de captura exclusiva para Chile. Hasta ahora nos ha respetado la frontera, posiblemente considerando la capacidad que tiene nuestro país de controlar nuestro espacio marítimo de uso económico exclusivo.

Un tema que me ha preocupado es el dumping que habría estado generando China en sus colocaciones en Chile de bolas de acero para la molienda mineras, que hace temer el cierre de una importante empresa que las produce en nuestro país y la que genera una demanda vital para la producción de acero en nuestro país. El dumping se habría demostrado, pero contra él se ha actuado con ligereza y retardo. Diferentes sectores económicos, entre otros el de agricultura, se han mostrado contrarios a la aplicación de protección de esas importaciones. Se puede presumir que es por temor a represalias chinas que se generen en contra de importantes exportaciones de la agricultura chilena al país asiático, no sólo en frutas.

Parece justo de temer de las actuaciones de China en el ámbito internacional.

Se puede recordar que en el Gobierno de Allende, que se caracterizó entre otros temas el ser apoyado por un conglomerado de corrientes políticas, lo que a mi juicio fue una causa importante de su fracaso, la corriente socialista más identificada con China era una de las más extremas. Allende recibió importante ayuda del país asiático tanto en recursos financieros como en alimentos. Seguramente muchos de los mayores residentes en Chile recuerdan la llegada del famoso “chancho chino”.

Sin embargo antes de lo anterior expuesto, China de inmediato al Golpe Militar reconoció al nuevo gobierno chileno y le dio un trato poco digno al personal de la Embajada de Chile en China, trato que a mi juicio no se justificaba. La visión de largo plazo de China seguramente la llevó a esa actitud con el objeto de asegurar su abastecimiento futuro de cobre.

La historia de la generación de la actual China es muy interesante. Ver cómo fue tomando poder político internacional cuando se identificaban dos Chinas, la Comunista que iba triunfando bélicamente y la Nacionalista que terminó dando origen a Taiwan. Después de haber sido reconocida en Naciones Unidas a Taiwan como nación, la China continental logró que la Organización Internacional terminara por no reconocerla como nación independiente, cuando de hecho lo es.

Pienso en uno de mis próximos artículos hacer mención especial a aspectos históricos que conducen a China a su situación excelente actual.

Un tema que merece especial atención es el de la llamada “Globalización”, que muy bien ha sabido aprovechar China, generando grandes reservas financieras internacionales que las ha usado en préstamos externos y más recientemente en inversiones extranjeras directas. Ha descansado especialmente en su política cambiaria, que ha favorecido exportaciones y que ha contribuido a defenderse de potenciales importaciones.

Igualmente es interesante analizar el Acuerdo de Libre Comercio con Chile, en sus pro y en sus contras.