Medicina natural, actualidad y economía

Mal estado nutricional de los trabajadores chilenos. Mala alimentación y falta de actividad física

Interesante artículo en El Mercurio del 6 de junio sobre la alimentación y el estado nutricional de trabajadores de empresas privadas y públicas con información obtenida de una investigación dirigida por expertos del Departamento de Nutrición de la Universidad de Chile y Sodexo Pass.

 

 Se encuestó a más de 1.700 trabajadores de empresas privadas y públicas.

 

 Se captan serios problemas en el estado nutricional de esta población, como también se identifican causas. Surgen también de esto importantes recomendaciones.

 

El doctor Eduardo Atalah, Director del Departamento, uno de los autores del estudio, entrega importantes antecedentes y preocupaciones. Lo más preocupante, según este prestigiado nutriólogo es que “a pesar de que la edad promedio de los encuestados bordea los 38 años, se encontró una alta prevalencia de hipertensión arterial, exceso de colesterol y presencia de los triglicéridos”. “La mitad de ellos no estaba diagnosticado”. “El 30% de los hombres tenía presión alta”.

 

Respecto al estado nutricional, más del 60%  de los encuestados tienen sobrepeso y un 15% son obesos.

 

Un tercio de las personas presentan obesidad abdominal (más de 80 cm de diámetro en mujeres y más de 92 cm en hombres). Al parecer hay un error, ya que no se trata de diámetro sino de perímetro abdominal.

 

Un 30% de los encuestados no estarían conscientes de su problema, lo que agudiza en los obesos. El 70 % de ellos no se consideraban con esa anormalidad. Un 26% de los con sobrepeso se consideraban de peso normal. Sin duda que esto constituye un tema preocupante. No están conscientes de sus problemas.

 

La mala alimentación pasa a ser uno de los factores más importantes del mal estado nutricional, junto con el sedentarismo.

 

La encuesta reveló bajo consumo de frutas y verduras, lácteos, pescados y leguminosas, frente a una alta ingesta de pasteles y frituras.

 

El estudió constató que “alrededor del 17% de los encuestados señaló desayunar menos de tres veces por semana y más de la mitad sustituía la última comida por un té, que no incorpora ni frutas ni verduras”.

 

Debe tenerse presente la importancia del desayuno para evitar o reducir la acumulación de grasa en la zona abdominal. Éste debe aportar alrededor del 20% de la energía total diaria de la dieta; debe incluirse en él alimentos proteicos (leche, queso incluso legumbres),  carbohidratos ricos en fibras (avena, pan integral), frutas enteras bien lavadas que son aportadoras de minerales y vitaminas.

 

El doctor Atalah expresa “Sería bueno promover onces saludables que incluyan verduras, panes integrales, carnes magras y lácteos descremados”. 

 

Es importante que se tengan a lo menos cuatro comidas diarias, para que en ninguna se coma en exceso. La mayor distribución de la dieta en más comidas, contribuye a menos sobrepeso y obesidad.

 

El artículo presenta un interesante cuadro titulado  “Alimentación laboral”, que entrega grandes deficiencias en el consumo de alimentos diarios y semanales si se los compara con las recomendaciones entregadas por el Ministerio de Salud

 

         Frente al consumo de frutas en que se recomienda 2 a 3 veces al día, sólo un 16% cumple la recomendación.

         Para una recomendación similar para verduras, solamente un 17% la cumple.

         Para lácteos, 2 a 4 porciones diarias, sólo un 19% la cumple.

         En leguminosas se aconseja su consumo 2 a 3 veces a la semana, lo que cumple sólo el  7,6% de los entrevistados.

         Peor es el resultado en pescado, en que sólo un 5,6% cumple la recomendación de un consumo de 2 a 3 veces por semana.

         Excesos se aprecia en el consumo de pasteles, en que frente a la recomendación de un consumo eventual, un 55% los ingiere 3 a 5 veces a la semana.

         En frituras, el exceso es aún mayor. Una recomendación de consumo eventual enfrenta a que un 60% las ingiere 3 a 5 veces por semana. 

 

Sin dudas que esta investigación nos entrega una preocupante realidad.

 

  1. Existe en la población laboral una alta presencia de obesidad abdominal, llamada también central o androide. Esta obesidad tiene peores consecuencias en la salud de la persona que la otra obesidad llamada periférica, en la que se acumula grasa en glúteos, muslos y brazos. Favorece el desarrollo de diabetes y gota, además de enfermedades cardiovasculares como le hipertensión arterial.
  2. Esta realidad tendría como causas principales la mala alimentación y la falta de ejercicio físico de forma regular.
  3. Se aprecia que un porcentaje importante de la población encuestada parece desconocer las recomendaciones alimentarias oficiales.
  4. Tengo la sensación de que se ha debilitado la campaña del consumo de las 5 porciones diarias entre frutas y verduras y que a mi juicio nunca llegó a tener la amplitud deseada. Es preocupante propaganda televisiva que trasmite mensajes tales como “un vaso de cerveza es equivalente a una manzana”, o la publicidad que alienta a un mayor consumo de margarina y mantequilla.

 

Plausible que se haya hecho esta investigación. Ojalá se pueda ampliar a otros sectores de la población, no sólo para conocer la presencia de los problemas sino que también sus causas y reforzar recomendaciones.

El tema del sedentarismo y de la mayor actividad física daría para un análisis especial. Afecta a gran parte de la población chilena.

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